Octubre de 2022
Comunicado
Foro Argentino de Defensa Comité Ejecutivo
Desde las últimas noticias sobre el malogrado intento de adquisición del FA-50, han aparecido distintas versiones sobre la incorporación de aeronaves “supersónicas”. Vamos a efectuar un breve análisis sobre lo que se conoce.
Un poco de historia
Desde la desprogramación del Sistema de Armas Mirage (Mirage III, V Finger y Mara) la Argentina perdió su capacidad de interceptar aviones sobre su aeroespacio soberano. Un lector bien informado nos diría que aún se encuentran operativos los aviones A4-AR y Pampa, que poseen alguna aptitud para esta tarea. Esto es absolutamente cierto si nos disponemos a interceptar aviones livianos y turbohélices de hasta 280 nudos de velocidad. Pero si nuestro objetivo es un birreactor de negocios (Cessna Citation, Learjet o Bombardier CRJ) nos vamos a ver en serios problemas, porque la mayoría de estos jets ejecutivos igualan o superan las prestaciones de nuestros aviones más sofisticados. No incluyamos en este análisis a los aviones de combate de la región (Chile, Brasil, Perú, etc.)
De qué se habla?
Es un hecho que el Ministerio de Defensa ha descartado una oferta para adquirir aviones israelíes Kfir, lo que ha traído un poco de prudencia sobre este asunto. Estos aparatos de principios de los setenta, con una logística compleja y distintas fuentes de abastecimiento, reposan hace tiempo en su tierra natal, aunque todavía integran las dotaciones de Sri Lanka, Colombia, Ecuador.
No obstante, existen noticias sobre el interés del Gobierno argentino por el avión chino-paquistaní JF-17 “Thunder”. Este proyecto binacional iniciado a fines de los noventa en la actualidad tiene un solo operador (la Fuerza Aérea de Pakistán, con 135 aviones entregados y 64 ordenados) y pedidos por las Fuerzas Aéreas de Nigeria y Myanmar.
Teniendo en cuenta el notable acercamiento de nuestro país hacia la República Popular China no debería descartarse que este interés se convierta en una posible adquisición. Veamos entonces de qué se trata?
Chengdu FC-1 / PAC JF-17 “Thunder”
Es un monoplaza de combate multirrol que puede desarrollar una velocidad de 1,6 de Mach. Sus dimensiones y pesos son levemente inferiores a los de nuestros Mirage, pero posee capacidad de reabastecimiento en vuelo (una deficiencia del Sistema Mirage argentino).
Las diferencias más importantes se encuentran en su motor, aviónica y radar de abordo. Existen cinco variantes de este avión, tres denominadas Block 1, 2 y 3, una biplaza con capacidad operativa completa, y una destinada a Myanmar.
Debe destacarse que la planta de poder es un turbofán ruso Klimov RD-93 (aunque podría equiparse con el turbofán chino WS-13), el radar chino KLJ-7 y una serie de equipos de alerta radar y guerra electrónica actuales.
Existen desarrollos en curso sobre distintas variantes del radar que incluirían al Grifo 7 (Galileo – Italia), el RC-400 francés de Thompson-CSF y el Vixen 500 británico de Selex Galileo.
Se estima que cada ejemplar de la variante más desarrollada (Block 3) puede costar unos 40 millones de dólares.
Esto contrasta notablemente con las expresiones del gobierno sobre el FONDEF. Es decir, aquí no entran en juego los pesos, sino el crédito externo y los dólares.
Además, deben considerarse algunos aspectos logísticos importantes, como las fuentes de abastecimiento chinas, paquistaníes, rusas y quizás europeas.
Un interrogante
A pesar de que no resulta tan evidente, es notable el acercamiento de nuestro país hacia la República Popular China, como el swap de monedas, la Base en la Patagonia y esta posibilidad. Sin embargo plantea una cuestión geopolítica importante: le vamos a comprar armamento a quién está depredando nuestras riquezas pesqueras?